¿Te has preguntado alguna vez, por que viajamos?
Viajar es un término muy complicado de explicar pero exageradamente fácil de definir.
Y si no… que se lo digan a La Real Academia Española de las Malas Lenguas. Ellos definen viajar con unas pocas palabras. “Trasladarse de un lugar a otro por cualquier medio de locomoción”.
¡Olé! ¡Se habrán quedado a gusto!
Once, once míseras palabras que intentan definir un sentimiento que para mí y para muchos de nosotros es inexplicable.
Si todos los que viajamos nos limitásemos a creernos estas once palabrejas, ¡no viajaría nadie!
Por qué viajamos…
No sé tú, pero yo no he nacido para quedarme en un rinconcito. El mundo entero está ahí fuera esperando a enseñarme sitios maravillosos a los que solo llegaré viajando. Y no seré yo quien contradiga al mundo.
Según un falso Neruda, “Muere lentamente quien no se arriesga, quien abandona sin empezar, quien se queja de su mala suerte, QUIEN NO VIAJA, quien no lee, quien no sueña ni persigue sus sueños, quien no lo intenta.”
Y yo no quiero morir. O al menos no todavía, sin haber visto lo que el mundo tiene que ofrecerme.
A lo largo de mi vida y de mis viajes me he dedicado a observar, a esperar desde la barrera, a callar, a hablar e interactuar, lo que me ha llevado a aprender. ¡Bonita palabra!
He conocido a muchos y distintos tipos de viajeros. ¿Y sabéis que?
Cada uno de ellos viaja por razones distintas.
Cada uno somos de nuestro padre y de nuestra madre. Me hace mucha gracia cuando “Pepe” le dice a Juan… ¡Mira ese tío raro! Como si todos tuviésemos que estar cortados por el mismo patrón.
No señores, esto es la jungla.
Vivir y dejar vivir, no es solo un lema barato usado por demagogos. Te hace más feliz. Te lo dice uno que ha sido mucho tiempo “Pepe”.
Tipos de Viajes:
He conocido y conozco a gente que viaja y vive por y para el TRABAJO. ¡Puff! El peor de los viajes sin duda.
Las palabras viajar y trabajo, no deberían ir nunca en una misma frase si no van precedidas de un “NO” como una catedral.
Porque cuando viajas por trabajo, ya puedes decirle adiós a la magia. Se acabó. Caput.
Cuando algo se convierte en obligación deja de ser divertido.
Por el contrario, he conocido a gente que viaja por AMOR.
¿Hay algo más bonito que viajar por amor?
Dejar toda tu vida atrás, familia, amigos, trabajo… por ese alguien que te ha robado el alma y que sin su compañía te sientes vacio por dentro y por fuera. Meter todas tus cosas en una maleta y decir adiós no es fácil, pero si el amor no puede con ello, no sé qué otra cosa podría hacerlo…
Los caminos de esta pareja se cruzaron en Guatemala, ella viajó para hacer un VOLUNTARIADO (otra de las razones de viajar) y conoció a un chico local. Se enamoraron, y en su despedida, él prometió que la buscaría.
Así fue.
Al cabo de unos meses empaquetó su vida y aterrizó en España con una sonrisa en la cara y con muchos miedos a sus espaldas.
Por desgracia, al cabo del tiempo la historia salió rana y sus caminos se separaron, No podía ser todo tan bonito :(
También he conocido gente que ha viajado por DESAMOR o para OLVIDAR.
Una ruptura no es fácil y menos si has estado con esa misma persona durante mucho tiempo.
Hay que pasar por un periodo de luto para después reinventarte… La rutina fue lo que le hizo huir, perderse y poner punto y final a sus recuerdos y a su historia.
Cogió la maleta y se dijo: ¿Pies para qué os quiero?
Y empezó un viaje sin fecha de vuelta por Sudamérica, empezando en Argentina y terminando en la Guayana Francesa.
Dice que es lo mejor que ha hecho en su vida. ¡Le creo!
¡Porque no hay nada mejor que perderse para poder reencontrarse!
El viaje “BREAK” es al que más acostumbrados estamos las personas como tú y como yo.
Esa parada en el camino, ese tipo de puerta por la que salimos de la realidad, por una semana, como mucho dos o incluso tres (los más afortunados). Ese viaje al que llamamos, VACACIONES.
Vacaciones tan esperadas en las que llevabas pensando todo el dichoso año. Pero que se acaban en ¡15 putos días!
Que si te descuidas, se te junta el… salir de la oficina con una sonrisa jocosa en la cara, despidiéndote de tus compañeros, gritando en silencio ¡¡Joderos cabrones!! … con el ¿Ya estás aquí? ¿Cómo lo has pasado?
Esos mismos compañeros que te despedían, y ahora son los que sonríen intencionadamente con una mirada de… ¿Qué? ¿Te creías que te iba a durar mucho? Ya te dije que nos veíamos pronto.
¡Dios! ¡Qué sensación más amarga!, solo comparable con el sonido del despertador un Lunes a las 7 de la mañana.
¡Maldito seas despertador!
¿Y qué me dices de los viajes en FAMILIA?
Me encantan las familias viajeras.
Ver a aquellos que no se privan de viajar por el mero hecho de tener hijos y de haber formado una familia.
La familia que viaja unida permanece unida.Con sus más y sus menos, pero unida.
Da igual que sea a Benidorm, a Peñiscola, a Matalascañas del Freso o a Sebastopol. Me he encontrado con familias haciendo trekking subiendo al Roque Nublo (Gran Canaria), con sus hijos en una de esas mochilas a la espalda.
¡Un olé por esas familias!
Que mientras yo llevaba la lengua fuera y paraba a beber agua cada 15 minutos, ellos subían a sus hijos tal canguro australiano, con una sonrisa en la cara.
También conozco a familias pudientes (como decía mi abuela) con un alto poder económico, en las que el abuelo invita a hijos y respectivos, a nietos y hasta al apuntador a pasar las Navidades de vacaciones en el Caribe, (Punta Cana fue la última vez).
Venga… puedes decirlo conmigo, que sé que lo estás deseando… ¡SUERTUDOS!
Cuando llegas a cierta edad, pasas de viajar con la familia.
Tus padres te aburren, e incluso querrías haberte quedado en casa solo, para aprovechar a prepararle una cena romántica a la chica o al chico que te traía de cabeza ese verano, en el que las Ketchup lo petaban con el Aserejé.
O bien hacer una fiestecilla en casa con los amigos, colegas y colegas de los colegas que puedan traer más cerveza. Porque has visto como se las gastaban en American Pie, American Pie 2, American Pie 3 y toda la saga.
¡No me digas que no!
Seguro que tú también conoces a la Madre de Stifler, jajaja
Y comienzas a viajar, pero de otra forma. En GRUPO.
Ese grupo de amigos, que son hormonas con patas, y que alquilan un apartamento en la playa de Gandía una semana y entran en un bucle de fiesta, playa, playa, fiesta hasta que su cuerpo pide ¡Clemencia!
Estos viajes se recuerdan siempre. Y no por los maravillosos sitios que ves, sino por la cantidad de risas y recuerdos que te traes.
Hablando de recuerdos… un amigo de un amigo… (ya sabéis a mi me lo han contado) intentó tirar por la ventana un huevo desde el piso 7 de un apartamento en Gandía a la piscina del vecino, previamente avisado de que no atinaría a colarlo por la ventana y daría en la otra hoja del cristal.
Se dispuso a coger carrerilla y… según “me han contado” al grito de ¿Te lo he dicho o no te lo he dicho?, el olor a huevo no se fue en tres días de la cocina.
Hay gente que viajan por un motivo muy concreto, un interés especial, un evento.
Viajeros de ida y vuelta, o mochileros de solo ida.
Viajeros que buscan; una aventura, conocer nuevas culturas, formas de vivir, nueva gastronomía y religiones, turismo sexual (que lo hay, no nos engañemos), fotografiar al león del Serengueti en época de apareamiento, bucear en la barrera de coral, o dar la vuelta al mundo haciendo auto stop…
Yo mismo firmaría muchos de estos motivos que te impulsan a viajar, porque estoy seguro que cada uno tiene el suyo.
Y si tú aún no has encontrado el tuyo TE PIDO QUE LO BUSQUES, mejor dicho, que lo encuentres.
¡Para de leer ahora mismo!
Cierra los ojos y dime dónde querrías estar al abrirlos.
Seguro que ya lo has encontrado. Ahora lo tienes fácil, busca como puedes llegar allí, y pon todo tu empeño en conseguir vivir en persona ese lugar soñado.
Que no te lo cuenten. ¡Muévete! ¿A qué esperas?
A mí se me ocurre no uno, si no miles de sitios que me gustaría no verlos, sino vivirlos.
¡Porque viajar es vivir y yo quiero vivir mucho!
Es muy duro soñar despierto con esos lugares mágicos. Porque yo no he estado en todos los sitios del mundo, pero…
¡Están en mi lista! Empieza a escribir la tuya.
Porque la vida no se mide por el número de veces que respiras sino por el número de veces que el mundo te sorprende y te quita la respiración.
Viajar te hace más rico, te llena el alma, porque un viaje no solo se vive una vez sino que se vive al menos tres: cuando lo planeas, cuando lo disfrutas y cuando lo cuentas y a partir de ahora YO TE VOY A CONTAR LOS NUESTROS, en nuestro BLOG.
Y digo «nuestros» porque el viaje que más me gusta es el VIAJE EN PAREJA y así es como viajo yo ahora.
¿O debería de decir viajamos?
Si compartir es vivir y vivir es viajar, yo comparto mi viaje.
¿Y tú? ¿compartes el tuyo?
Viaja como quieras. Viaja con quien te siga, pero viaja.
Viaja localmente o cruza fronteras, pero viaja. Ves a ver a tu tía la del pueblo, o a tu amigo el italiano, pero viaja.
Escribe tu propia historia.
No hagas como yo solía hacer y te quedes entre el kilometro 34 y el 55 de la Autovía Madrid- Barcelona. Ahora, siempre tengo un viaje en la cabeza.
No seas mi yo antiguo y sal de tu zona de confort, experimenta, vive.
Porque no encontrarás ningún sitio interesante si siempre sabes a dónde vas.
Porque si piensas que la aventura es peligrosa, prueba la rutina.
¡Es letal!
Yo viajo. Nosotros viajamos. ¿Y tú?
Otra de nuestras recomendaciones de viaje es que NO VIAJES SIN UN SEGURO DE VIAJES.
Nosotros siempre viajamos con IATI SEGUROS, son los mejores y si además lo cogéis con este link, tendréis un DESCUENTO DEL 5% EN EL SEGURO DE VUESTRO VIAJE, por ser nuestros lectores. ¡APROVECHALO!
Si te ha gustado, DÉJANOS UN COMENTARIO y cuéntanos cómo viajas tú, a dónde o con quién.
Compartelo en cualquiera de tus redes sociales ¡Son 30 segunditos y nos haces un gran favor!

¡CON TODOS NUESTROS TRUCOS!
CÓMO AHORRAR EN:
⇒ Vuelos/Alojamiento/Transporte
¡Y MUCHO MÁS!
100% ¡Libre de Spam!
Buscando informacion sobre Ayuttaya, encontre el sitio de ustedes. Me enganche con el de tal forma que estoy leyendo desde hace horas. Me gusta mucho su estilo, la forma que tienen de contar experiencias, de dar consejos.
Comparto muchisimo de sus motivaciones, me identifique contigo cuando dijiste «siempre estoy con un viaje en la cabeza». A mi me pasa lo mismo, es mas, faltan 6 meses para llevar a cabo el proximo, que ya estoy pensando en como voy a planificar el siguiente.
Y ya que hablaba de nuestro proximo viaje, les cuento que sera a Tailandia y Vietnam. Un viejo sueño que tenemos con mi esposa hace años. Increiblemente, estamos a pocos meses de llevarlo a cabo, aun me parece un sueño. Y eso que con el paso de los años hemos recorrido muchisimos quilometros, muchisimos aeropuertos, hoteles, gentes e idiomas, experiencias, lugares….en fin, ustedes eso lo saben.
Les escribo desde Montevideo, Uruguay. Gracias por compartir su pasion!!
Hola Ariel!!!! Tanto Moni como yo queremos darte las gracias por tu comentario. Creo que ha sido uno de los comentarios, que más nos han gustado de todos los que nos han escrito, tanto en el Blog, como en nuestras redes sociales, y nos hizo muy felices leerlo. :)
Gracias a comentarios como el tuyo, nos dan muchas más ganas de seguir trabajando, escribiendo y compartiendo experiencias, sobre nuestros viajes y que pueda servir de ayuda a otros viajeros como tú y tu esposa.
Esperamos que nunca se os pasen las ganas de viajar y que SIEMPRE tengáis un viaje en la cabeza.
Un saludo enorme desde Uk para Uruguay.
Os deseamos muchos y buenos viajes.
Raúl y Moni